Cuando recién entré a la uni... en mi salón había un chico medio chorero pero agradable dentro de lo que cabe, que se llegó a mostrar en cierto grado muuuy simpático conmigo, y no hallaba pretexto para hacerme la plática, etc.... Una fría mañanita... de repente irrumpió en el salón... me tomó de la mano y me llevó a una jardinera justo ahí me dijo... -observa la vegetación de la jardinera y me dices que ves de raro- lo que vi fue una abundante mata de mastuerzos pero justo en medio vi un ramito de un alcatraz y varias azucenas rosas- y pues le comenté que era eso y me contesto muy solemne: -por haber adivinado te quedas con el ramo... nos hicimos novios casi de inmediato... no pasó mucho tiempo cuando me dijo: en breve te tengo una sorpresita que ni te la esperas... y pues me emocioné pensando que sería algo bueno puesto que era mi cumpleaños en días siguientes....
Y no... no lo fue... me destrozó el corazón cortando nuestra relación cobardemente por medio de un escrito y le voló rapidito a aventarle el can a varias de mis compañeras de salón librándose así de mí...
De eso ya pasaron muchos años...
Pero me queda la moraleja constante de esta situación: no necesariamente las sorpresas deben ser buenas... y así también no necesariamente debemos esperar demasiado de nuestros allegados, eso podría ser una forma de decepción constante y un lastre para nuestra existencia... (may este anillo te queda al dedo y en ocasiones a mí también)
1 comentario:
uchales en serio t hicieron eso?? mmm creo q antes ni hermanas eramos!!(nunka nos contabamos nada) pero bueno ahora es diferente creo hay mas comunicacion jiji!! te kiero muxoo taradaa!! no lo olvidesss!!
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